Todos experimentamos dificultad al emprender un nuevo proyecto o tomar una ruta diferente. Crear una nueva realidad y tener la expectativa de alcanzarla genera duda, incertidumbre y miedo al error. La confusión y las dificultades son, muchas veces, la mezcla perfecta que precede al orden y al aprendizaje.
El dolor del crecimiento
Lograr algo significativo implica vacilación, esfuerzo y frustración. Es parte natural del proceso. Crecer duele, porque desafía zonas cómodas y demanda energía, determinación e inteligencia enfocada.
La verdad es que no todos llegan del otro lado, pero son muchos menos quienes ni siquiera lo intentan. Y es ahí donde se define el destino profesional y personal de un líder.
Las 6 disciplinas del crecimiento
Para avanzar, no basta con el deseo. Es necesario desarrollar competencias concretas. Crecer y alcanzar el siguiente nivel requiere el dominio de seis disciplinas básicas:
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Ser efectivos: generar resultados, no solo actividad.
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Rendir cuentas: asumir responsabilidad de nuestras decisiones y procesos.
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Liderar efectivamente: influir con propósito y dirección.
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Comunicarse y colaborar: conectar con otros y construir juntos.
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Resolver problemas: enfrentar el conflicto con análisis y criterio.
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Tomar decisiones: elegir con valentía, rapidez y fundamento.

El crecimiento es una responsabilidad
Crecer implica mirar hacia adentro y comprender nuestra esencia. No todo se consigue, pero sin duda se logra mucho más cuando nos hacemos responsables de intentarlo con disciplina y convicción.
Nada relevante pasa por sí solo. Todo es resultado de la energía que invertimos. A veces lo que más esperábamos no ocurre… pero lo más transformador sucede si estamos en el lugar adecuado y en el momento correcto, y eso, sí depende de nosotros.
El líder adaptativo no espera, provoca su evolución
El liderazgo adaptativo no deja su crecimiento en manos del destino ni de los demás. Lo provoca, lo cultiva y lo mantiene con visión y constancia.
En las próximas entregas abordaremos, con claridad y simplicidad, cada una de estas seis disciplinas clave para el desarrollo profesional y humano. Porque crecer duele, pero duele más quedarse igual.